Inevitable decirlo: estamos en verano y llueve. Me parece que alguien no entendió la ecuación verano=sol. Dios, no puede ser que la raza humana dependa tanto de mí, y que tenga que explicarle una vez más que en verano no caen gotas del cielo. Igual, hay algo más que me esta preocupando. Dada mi abundancia de tiempo libre, invertido en redes sociales; pude llegar a una conclusión: el mundo se esta convirtiendo lenta y silenciosamente en un sitio romántico. Estoy viendo mucha cursileria dando vueltas por la galaxia. Será el hecho de que nunca me consideré una de esas personas con graves problemas psicológicos, del tipo de individuos que necesitan una palabra o un gesto cariñoso para sentise queridos o necesitados; que esta actitud masiva, o moda veraniega, simplemente me da nauseas. Mi descubrimiento va más allá de relaciones realizadas, va por ese sentimiento de primavera atrasada que cunde en la sociedad adolescente. No estoy criticando, estoy demostrando mi sorpresa. Fucking adolescentes con sus hormonas revueltas, el amor entra en ese grupo de cosas que terminan en algun momento
